Una de las mejores sorpresas que nos trajo 2020 fue el regreso de la Saga Crepúsculo, un fenómeno literario con una legión de fans inmensa, que aún tiene hueco en su corazón para la historia de amor de Edward y Bella, a pesar de que su autora le pusiera broche final con Amanecer en 2008. Hay historias con una fuerza tan grande, con una capacidad de captar al lector tan intensa y con un don tan especial para enamorarte entre páginas, que sobreviven al paso de los años y conquistan nuevas generaciones. De esta forma, hay historias que se convierten en eternas y atemporales, y lo mismo hacen soñar al lector de 15 años, como al de 45. La literatura es universal y tiene un poder inigualable.
La Saga Crepúsculo ha funcionado y lo seguirá haciendo porque tiene los ingredientes perfectos: un chico misterioso (que desvelará que es un vampiro), una chica especial (que se considera del montón, pero que demostrará ser única), un amor imposible (que los hará enfrentarse a todo), un escenario extraordinario (el paisaje y su belleza también es protagonista) y un objetivo común (estar juntos por toda la eternidad). Vampiros, lucha, amor. Si mezclamos todos estos ingredientes en su proporción perfecta obtenemos una de las sagas literarias juveniles más vendidas de todos los tiempos, que a su vez dio el salto a la gran pantalla y regaló a sus fans cientos de minutos de ficción inolvidable.
Leer Sol de medianoche es reencontrarte con el inicio de esta historia de amor que nos conquistó hace más de una década, y volver a sentir todas aquellas emociones, pero esta vez desde el punto de vista de Edward. En estas 800 páginas estaremos dentro de su cabeza, como lo hace él con todos los que le rodean excepto con Bella, y comprenderemos cómo se siente, qué piensa, cómo de grande es el amor que siente por ella, a la vez que conoceremos, de forma más detallada las historias de Carlisle, Esme, Rosalie, Alice, Emmet y Jasper. Por tanto, no se trata solo de una revisión de Crepúsculo, sino que, en cierto modo, es una ampliación a través de la cual podemos comprender muchas cuestiones que en el primer texto quedaron sin resolver o que, simplemente, no llegaron a narrarse. Con la incorporación de esta nueva novela a la saga, la lectura conjunta de Crepúsculo y Sol de medianoche es la mejor forma de iniciarse, para posteriormente continuar con Luna nueva.
La virtud de un texto narrado en primera persona es que nos permite vestirnos con la piel del protagonista, sus ojos pasan a ser los nuestros y sus pensamientos corren por nuestra cabeza. La empatía que alcanzamos con el personaje es infinatamente mayor a cuando leemos un texto en tercera persona, si bien esta afirmación no es una ley escrita y depende muchísimo de la forma en la que narra el escritor. Sin embargo, en esta caso, podemos afirmar con certeza que en la lectura de Sol de medianoche puedes sentir las emociones de Edward como propias.
¿Por qué hemos tenido que esperar tantos años para leer esta nueva versión de Crepúsculo? La respuesta está en la filtración que se hizo de los primeros capítulos a través de internet, lo cual desmotivó y decepcionó a la autora, que en ese momento decidió alejarse de la historia por un tiempo indefinido. La autora afirmó a través de diferentes entrevistas, que el proceso de escritura de este libro ha sido el más duro de su carrera, hasta el momento, y que siempre pensó que no llegaría a terminarlo. Pero que los lectores llevaban años queriendo leerlo y que nunca dejaron de reclamárselo, por lo que su tenacidad le llevó a ponerle punto y final a la obra.
Y la pregunta que nos hacemos todos los fans de la saga es: ¿y aquí acaba la historia? ¿ya no conoceremos nada nuevo sobre estos personajes? Por lo pronto, la autora no tiene planes a corto plazo, pero ha prometido que en algún momento narrará la historia de Renesmee, la hija de Edward y Bella. La espera promete ser larga, pero valdrá la pena.
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La gata que lee 